Episodio 47 – La Batalla de Sentino

La batalla más grande de Italia, numéricamente hablando. La batalla más importante de Roma, estratégicamente hablando. Estamos en el comienzo de una nueva era para la ciudad de las Siete Colinas.


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Transcripción Parcial

Hola, les habla Abel, desde Pekín, China. Bienvenidos a mi podcast.

El Cuento de Roma, Episodio 47 — La Batalla de Sentino.

Estamos en el año 295 AC.

Después de mirarse en las caras por dos días, los soldados de ambos lados ya no daban más.

Y algo extraño sucedió al tercer día, en el terreno vacío entre los dos ejércitos.

Alguien puso un ciervo en la zona muerta — en el llano entre las dos fuerzas, y cuando el ciervo se echó a correr por el prado, alguien soltó un lobo a perseguir al cervato.

Los galos, que estaban parados al lado de los Samnitas, se pusieron a lanzar sus jabalinas hasta que el ciervo cayó muerto, mientras que los Romanos permitieron que el lobo se escapara vivo entre sus lineas, ya que representaba la divinidad del Quirinal.

— “Mira lo que han hecho estos bárbaros,” decían los romanos. “Mataron al ciervo, protegido por nuestra diosa Diana! Van a caer!”

Desde ese instante, la mayoría de los romanos estaban firmemente convencidos que los dioses estaban en su favor.

Ahora, antes de seguir con esta batalla de manera cinematográfica, tenemos que analizar los hechos que hicieron que unos 100 mil soldados se encuentren en un llano al noreste de Roma, a punto de decidir quien es dueño de Italia.

Y para llegar a eso, primero tenemos que volver a nuestra batalla de Triferno, que es donde nos habíamos quedado en nuestro Episodio pasado.

Así que, vayamos a Triferno ya!

Vamos dos años para atrás.

Estamos en el año 297 AC.

Ya sabemos de las estadísticas de ese enfrentamiento, pero como para refrescar la memoria, tenemos de un lado 20 mil romanos, y del otro lado unos 25 mil samnitas.

Quinto Fabio Ruliano y Lucio Cornelio Escipión Barbato al mando de los romanos, y un tal Gelio Estacio al mando de los samnitas.

Ambos lados tambien estaban al tanto de Publio Decio Mus estaba en camino, con más tropas a disposición para el lado romano. Obviamente, estamos hablando del hijo de aquel Publio Decio Mus que se sacrificó en la Batalla del Vesubio, en el año 340 AC.

Cuando Ruliano estaba en camino al encuentro de las fuerzas samnitas, estos trataron de poner a las fuerzas romanas en una trampa, algo como lo que sucedió en las Horcas Caudinas, en el año 321, durante la Segunda Guerra Samnita.

Ruliano, demasiado astuto como para caer en esa trampa, simplemente se negó a entrar en el valle, y los samnitas se pusieron nerviosos que los refuerzos romanos llegarían en cualquier momento, y por ende, los Samnitas perderían toda chance de una victoria.

Así que los Samnitas bajaron de los montes alrededor del valle, y le salieron al encuentro a los romanos, en el llano cerca de la localidad de Triferno.

Ruliano aceptó la batalla, y los ejércitos se prepararon para la lucha.

En nuestra saga familiar, quiero mencionar que tres de los descendientes de Aeliana y Lucio, se encontraban envueltos en ese valle, aquel día.

Uno proveniente de Cesón, uno de Julia, y uno de Lucio — todos estaban ahí.

Y creo que ahora es un buen momento para darle nombres a esos seres nuevos en nuestra saga, porque hacerlo ahora o hacerlo mas tarde — cual es la diferencia?

Así que hagamos un breve paréntesis — uno—dos—tres, y veamos esto ahora mismo:

Cesón — Julia — Lucio.

[…]