Episodio 76 – Nace el Imperio Parto

El nacimiento del Imperio Parto, pero no de Partia. El comienzo de una nueva superstición, pero no el fin. Y el fin de Régulo, pero será verdad eso?


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Transcripción Parcial

Hola, les habla Abel, desde Pekín, China. Bienvenidos a mi podcast.

El Cuento de Roma, Episodio 76 – Nace el Imperio Parto.

Si Usted, alguna vez ha tomado leche de yegua fermentada, sabrá de su sabor.

Es chocante para el paladar no acostumbrado, y el sabor va de fresco y ácido — a punzante y acre.

Lo conocemos como Kefír — o yogur, pero también como Airag.

Y sus sabor, casi siempre es inolvidable.

Su bajo contenido de alcohol, aumenta, cada vez que el proceso de congelación y deshielo es repetido. Eso hace que uno se embriaga muy lentamente con esa bebida.

Pero un vez borracho — esa borrachera, puede persistir por un largo rato.

Los Mongoles, y los Escitas, más allá del Mar Negro, del Mar Caspio, y del Mar de Aral, sabían de eso muy bien.

(música de Partia)

Año 238 AC.

Partia. Hasta hace unos meses, simplemente una satrapía mas, del Imperio Seléucida.

El sátrapa seléucida llamado Andrágoras, estaba en su palacio circular, pidiendo por piedad.

Alrededor de él, unos 20 guardaespaldas, todos muertos.

Y frente a él, dos hombres.

Arsaces y su hermano menor, Tirídates. Este último, tenía un cuchillo adornado con perlas del Mar Rojo — un mar que él jamás había visto.

Entre los dos hombres, forzaban al sátrapa, a tomar leche de yegua fermentada.

Afuera, el padre de los dos hombres, esperaba a que el sátrapa dejara de implorar por piedad, una vez emborrachado.

Y al cabo de unas horas, cuando el alcohol de esa bebida, finalmente se apoderó del hombre, los ruegos terminaron.

Arsaces le dió una señal a su hermano. Era hora de usar ese cuchillo.

Al final y al cabo — según tradiciones de los Parnos, uno no podía asesinar a un rey, o un sátrapa, mientras éste estaba indefenso, y rogando por su vida.

Pero ahora — el sátrapa estaba callado.

El cuchillo. El choque.

El sátrapa dejó este mundo en menos de dos respiros.

Y con esto, Partia estaba bajo el dominio de Arsaces.

Un gran CAMBIO.

Pero — nosotros, para entender ese CAMBIO, tenemos que rebobinar unos años.

Así que — hagamos eso!

[…]